Cuando la movilidad de una persona se ha vuelto restringida, la capacidad de entrar y salir de su hogar u oficina se convierte en una desventaja y un factor importante en su calidad de vida. Si es difícil, pueden convertirse en prisioneros del lugar donde habitan o trabajan. Si es fácil y accesible, están abiertos a más formas de mantenerse activos y mantener una vida social segura y saludable.
Además de hacer que su hogar sea accesible para discapacitados, también debe considerar cómo hacer que sea seguro entrar y salir. Los códigos de construcción normalmente requerirán dos puntos de salida por motivos de seguridad. Cuando las personas recurren a llevar a una persona por encima de umbrales o escalones de entrada, todos los involucrados corren un gran riesgo de caídas y lesiones. Además, es fundamental que una persona pueda salir de su casa de forma independiente en caso de emergencia.
Qué puertas deberían ser accesibles
Según las normativas, los propietarios de edificios deben colocar al menos una puerta compatible en cada una de estas ubicaciones:
- Entrada y salida del edificio
- Entradas a edificios desde aparcamientos, pasarelas elevadas y túneles peatonales
- Cada unidad alquilada en un centro comercial
- Puertas, portales y portones interiores y exteriores en rutas accesibles
- Rutas de escape de emergencia
Los requisitos para los edificios nuevos son más estrictos, donde al menos el 60 % de las entradas públicas deben ser accesibles. Las entradas solo para empleados que requieren llaves, teclados numéricos o tarjetas de acceso cuentan como entradas públicas, así como entradas que sirven al público en general.
Qué significa accesible
Para los propósitos de las personas, una puerta accesible tiene un ancho libre de al menos 80 cm de anchura. En la parte inferior han de llevar un zócalo metálico de unos 40cm para evitar rozaduras o roturas al chocar con las sillas de ruedas y otras ayudas técnicas. La altura libre del hueco de la puerta será como mínimo 220 cm desde el frente de la puerta hasta el tope opuesto.
El ángulo de apertura de la puerta será de 90º como mínimo. Habrá que tener cuidado al colocar los topes de puerta en el suelo, para que no reduzcan este ángulo de entrada: una mala ubicación de estos topes reduce el ancho útil de paso en varios centímetros al no permitir la apertura total de la puerta.
El picaporte será ergonómico y estará situado a una altura ente 80 y 100cm. Podrá manejarse con una sola mano o con otra parte del cuerpo. Los pestillos y las cadenas son difíciles de manejar, es más recomendable otros dispositivos de cancela más manejables.
Se deben evitar las puertas excesivamente pesadas, o dotarlas de mecanismos de apertura automática. Los mecanismos de cierre automático serán de funcionamiento lento o regulable, para que puedan ser manejadas por personas con poca fuerza o que caminan despacio.
Las puertas correderas con cierre automático estarán provistas de sistemas o dispositivos de apertura automáticos en caso de aprisionamiento. Los mecanismos de detección de las puertas automáticas no deben dejar zonas sin cubrir, y han de ser capaces de detectar a niños, usuarios de silla de ruedas y personas de talla baja.
Algunos detectores, sobre todo los que se sitúan en las jambas, tienen dificultades al detectar bastones o muletas cerrándose cuando pasa la persona. Habrá que verificar que esto no ocurre. Es importante regular el tiempo de apertura de las puertas para que aquellas personas que caminan despacio tengan tiempo suficiente para atravesar la puerta. El color de la puerta contrastará con el de la pared en la que se encuentra, para facilitar su localización. A su vez el tirador o manilla contrastará con la puerta.
Espacio de maniobra y umbrales
Las personas que usan sillas de ruedas u otros dispositivos de movilidad necesitan espacio para maniobrar cuando se acercan a la puerta, alcanzan para abrir la puerta, maniobran a través de la puerta y luego cierran la puerta detrás de ellos. La cantidad de espacio varía según el ancho de la puerta de la silla de ruedas y la distribución general del edificio.
En general, las puertas que se abren hacia el usuario necesitan un espacio libre para maniobrar de al menos 4,5 metros. Para las puertas que se abren, el espacio libre para maniobrar es de 3 metros como mínimo.
Para evitar el resbalamiento de las sillas de ruedas, es importante que la pendiente transversal sea igual o inferior al 2% y que el suelo sea antideslizante. La normativa también determina que la rampa debe disponer de pasamanos continuos en todo el tramo de la misma.
Espacio sin barreras
La puerta de ahorro de espacio sin barreras permite que las personas con ayudas para caminar, andadores o sillas de ruedas las utilicen de forma independiente. La puerta es accesible para discapacitados porque se puede abrir y cerrar sin maniobras propensas a accidentes o ayuda externa. La manilla de la puerta siempre permanece al alcance. La puerta de ahorro de espacio se puede integrar en la planificación de manera económica y que ahorra espacio. Se puede llegar a la manilla de la puerta desde cualquier posición sin maniobras accidentales.
La facilidad de uso y la ganancia de espacio fueron examinados recientemente en comparación directa con las puertas giratorias y correderas convencionales por varios grupos de usuarios. Los resultados demuestran las ventajas de la puerta de ahorro de espacio debido al menor espacio necesario delante y detrás de la puerta, así como a la facilidad de uso ergonómicamente ventajosa, especialmente para personas con silla de ruedas.
La función y la apertura especial pueden ahorrar considerables costos de construcción si se planifica con tiempo. La hoja de la puerta se abrir a 90 ° y solo sobresalir un tercio del ancho de la puerta hacia el pasillo. Por lo tanto, los pasillos los pueden estrechar sin restricciones. La ganancia de espacio en comparación con una puerta batiente es de alrededor del 30%, lo que posiblemente puede beneficiar al baño.
Asas, tiradores, cerraduras y pestillos
- Las manillas, tiradores, pestillos, cerraduras y otros dispositivos en este tipo de puertas accesibles deben tener una forma que sea fácil de agarrar con una mano y no requiera agarrar, pellizcar con fuerza o girar la muñeca para operar.
- Los mecanismos accionados por palanca, los mecanismos de empuje y las manijas en forma de U son diseños aceptables.
- Cuando las puertas correderas están completamente abiertas, el mecanismo de apertura y cierre, debe estar expuesto y ser utilizable desde ambos lados.
- Los herrajes deben montarse a no más de 1.200 cm sobre el piso terminado.
